Segunda parte de la excelente película de Zombis (aunque nunca se denominan asi) dirigida por Danny Boyle, que esta vez simplemente produce, y deja su trabajo para el español Juan Carlos Fresnadillo director de una de mis películas Españolas favoritas, Intacto.
La película empieza con unos sobrecogedores cinco minutos, los mejores que he visto en el cine en años, que prometían convertirse en una de las mejores películas que haya visto en mi vida, pero no ha sido así. Aunque la película es muy buena, por desgracia no iba preparada a ver lo que encontré, y es que cuando a los 10 minutos ves aparecer a un niño de unos 12 años con una camiseta del Real Madrid, y una niñita pavita adolescente, que parecían que iban a ser los protagonistas de la historia (y luego se confirmo), se me cayo el mundo encima (intente ver y saber lo menos posible de esta pelicula, por eso me ha pillado de sorpresa).
No soy experta en películas de Zombis, me gustan, he visto un montón, pero no todas, por lo que ciertas cosas que me parecen licencias del genero, quizá no lo sean, pero me han chocado demasiado (al igual que supongo que les chocaron a los mas puritanos del genero que los zombis corrieran, cosa que no me ocurre, porque es un detalle que me encanta). A Romero le perdono todo, el fue quien creo el genero, y si quiere hacer Zombis inteligentes que lo haga, pero a Fresnadillo, no, además es que no llego a entender del todo que idea tenían aquí con cierto Zombie que se dedica a perseguir a los protagonistas.
Por lo demás como ya hacia Romero, y ya se hizo en la anterior parte, no solo tenemos una película aterradora y angustiosa de terror, sino una película que sirve como reflejo y critica de la actualidad.
En cuanto a los actores a pesar de la aparición de Robert Carlyle se hecha de menos, personajes de la fuerza y carisma de los civiles protagonistas de la primera parte, sobretodo el interpretado por Cillian Murphy.
La dirección de Juan Carlos Fresnadillo se ha adaptado a la de Boyle en la primera parte (incluso se adapta a la banda sonora, siempre destacable en las pelciulas de Boyle, que vuelve a ser de John Murphy), cámara digital, cámara en mano, planos rebuscados, ........., que también fue mas o menos su manera de rodar Intacto, así que tampoco ha perdido su estilo, todo lo contrario lo ha mejorado, y esperemos que esta vez, no tarde seis años, en volver a dirigir una película.
Una película sobrecogedora, con un ritmo intenso, y una ambientación fatídica muy creíble, que nos hará pasar unos momentos acongojados, y que tras un segundo visionado, al ya estar preparada lo que voy a encontrarme, seguro que mejora la valoración.
Puntuación 7/10
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