Este fin de semana revise esta excelente película de Wim Wenders, protagonizada por unos fuera de serie (cuando quieren y les dejan) que son Bill Pullman y Gabriel Byrne.
Un famosos productor de cine de películas violentas vive absorto en su trabajo al 100 %, hasta tal punto que solo le importa el trabajo, y esta dejando de lado a su mujer. Pero un día su vida cambia radicalmente cuando es secuestrado y a punto de ser asesinado.
Al mismo tiempo, se nos desarrolla la trama de un científico de la NASA solitario que no esta a gusto con su nuevo trabajo.
Camuflada en un thriller tenemos un análisis, una reflexión, (no una critica) sobre la violencia en el mundo del cine y en general, según los ojos del propio director.
Wim Wenders es un director que no necesita realizar una película compleja, ininteligible, y eso es lo que le hace tan buen director, con “simpleza” hace grandes películas, siempre acompañado con guiones inteligentes, grandes personajes, y excelentes bandas sonoras (en esta ocasión una de las mejores bandas sonaros que he escuchado en mi vida, con Ry Cooder en la cabeza).
Lo mas atractivo para mi, a parte de la soberbia banda sonora, son los numerosos diálogos que aparecen sacados de una novela barata de policíaca (que es lo que ciertas personas mas critican de la película), y que la hacen aun mas especial, y que se acerqué mas a mi adorado genero negro que al thriller.
Puntuación 8/10
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