La película inaugural de BAFF 2009 es como pasar unas relajantes vacaciones en una playa japonesa, una historia que redescubre el placer de las cosas sencillas y lo estimulante que puede ser perder el tiempo contemplando el horizonte. Taeko, una profesora urbanita un tanto estresada, llega a un pequeño hotel junto al mar para pasar unas vacaciones. Regentado por el excéntrico Yuji, frecuentado por Haruna y espiritualmente inspirado por la misteriosa Sakura, el lugar funciona como un pequeño microcosmos donde los móviles no funcionan, echarse la siesta es casi obligatorio y la vida transcurre entre helados de judía roja, gimnasia matutina en la playa y cenas a base de langosta. Con planos y situaciones que remiten a Monsieur Hulot de Jacques Tati o Hana-Bi de Kitano, Megane es hilarante en sus resultados y mágica en su planteamiento. Una película encantadora que deja una sonrisa permanente en los labios.
Megane es una película ligera y tranquila que se centra en la transformación (incluso se podría decir que redención) de una mujer a causa de la serenidad de una paradisiaca isla y sus insólitos y misteriosos habitantes. Esta mujer aprenderá que incluso con las cosas más sencillas se puede aprender y disfrutar de la vida.
La nueva película de Naoko Ogigami, no es de las que pasen grandes cosas, además se desarrolla con lentitud, donde domina mas los silencios que los diálogos, pero a pesar de ello la película nunca llega a aburrir, sino que transmite toda esa quietud y positivismo, al espectador de una manera admirable, gracias no solo al idílico paisaje, sino al refinado e irónico sentido del humor, la sensibilidad en que nos cuenta la conmovedora y serena historia, y la buena labor actoral.
Satomo Kobayashi, Mikako Ichikawa, Ryo Kase, Ken Mitsuishi,y Masako Motai interpretan a los personajes principales de esta película, muy dispares, pero complementándose y presentando una buena química entre ellos.
Con una contagiosa tranquilidad y felicidad salimos de ver Megane, depende de cada uno lo que le dure, y quiera o no ver (o busque) algo más, por un momento a mi me basto.
Puntuación 6/10
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