Esta serie misteriosamente sigue en antena, no es una serie con una audiencia despampanante, ni es de gran calidad por lo que la critica no se vuelca en ella, pero aun así, ahí esta, aguantando el tipo, aunque pensé que tras su quinta temporada, y tras el retraso y no haber noticias de una sexta, pensé que ya la habían cancelado.
El profesor Johnny Smith sufre un accidente de automóvil, que lo deja en coma por seis años. Después de recuperar el sentido, Johnny comienza a tener visiones del pasado, presente y futuro que ocurren tocando artículos o a gente; los doctores atribuyen las visiones a la actividad en una "zona muerta " de su cerebro que esta tratando de compensar las supuestas partes dañadas de su cerebro. Johnny se entera de que Sarah, dio a luz a su hijo mientras el seguía en coma, Sarah lo visitaba pero conoció a un hombre con el que se caso. Con la ayuda de Sarah, de su marido Walt, y del terapeuta físico Bruce, Johnny comienza a usar su habilidad para resolver crímenes y evitar que muera gente inocente.
Sin embargo, sus deseos de hacer lo bueno son oprimidos por visiones de un futuro apocalíptico, que ve al estrechar la mano del candidato del congreso Greg Stillson, que de alguna forma ayudara a realizar un futuro terrorífico.
Esta serie que hace años vi por primera vez en la televisión valenciana, esta basada muy ligeramente en la novela de Stephen King del mismo nombre, y de la que se hizo, para mi, una muy película de la mano de Cronenberg protagonizada por Christopher Walken. En esta ocasión para su adaptación televisiva se opto por un no muy buen actor (aunque me caía simpático) y venido a menos de los 80 de películas de adolescentes, Anthony Michael Hall (que para mi sorpresa interpretara a Enigma en The Dark Knight, hay veces que me tengo que repetir muy a menudo que confió en la sabiduría de Christopher Nolan), que por lo menos da la talla, aunque tampoco es una serie que necesite grandes interpretaciones, no tiene mayor pretensión que entretener de una manera muy simple y cada vez mas “pastelosa”.
La serie me sorprendió mucho en su primera temporada, aunque tampoco había muchas mejores cosas por televisión en esa época (ni tenia Internet), en su segunda me engancho, en su tercera siguió gustándome, pero llego su cuarta y quinta, y ya la veía por inercia. Ahora en su sexta definitivamente y con valor opto por abandonarla.
Las temporadas de entre 13 y 17 episodios, han ido diluyéndose, han perdido el rumbo, y solo un par de episodios se centran en la trama mas importante e interesante y que debería ser central de la serie, que es el tema-relación-obsesión-persecución de Johnny Smith y el Senador/Congresista Greg Stillson (personaje interpretado por Sean Patrick Flanery). Los demás episodios, son episodios mas o menos autoconclusivos de calidad muy dispar, en donde nuestro protagonista por medio de sus poderes resuelve problemas que van desde una simple pelea de enamorados a un asesinato. Mientras tanto, caso tras caso, su vida personal y la de los que le rodean se va desarrollando poco a poco.
No es que haya cambiado mucho la tónica de la serie, desde el principio mostró sus cartas, una cartas interesantes pero ya canísimas tras verlas repetidamente; y es que después de seis temporada viendo lo mismo, no ganando en calidad sino perdiendo (y es que de calidad iba escasa así que ..... ) y sin mostrar en estos capítulos, ni un mínimo de cambio o novedad, todo lo contrario, un paso hacia atrás a todo, ya es difícil ver el atractivo a esta serie.
Puntuación 4/10 (y siendo muy generosa y porque las primeras temporadas me aportaron buenos y entretenidos momentos)
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