Mike Nichols vuelve a la política, y que mejor acompañado que por Aaron Sorkin (El Ala Oeste de la Casa Blanca, Studio 60, y alguna porquería cinematográfica que mejor no nombrar) que adapta una novela de George Crile.
La película como su nombre indica cuenta la historia real de Charlie Wilson, un congresista tejano algo diferente a lo que suele ser a simple vista un político (alcohólico, juerguista, cocainómano, aficionado a las prostitutas, …..), que a base de sus esfuerzos consiguió financiación encubierta (tanto de su país, como de países adyacentes) para los guerrilleros Afganos que se enfrentaron a la Unión Soviética en plena guerra fría (en los 80). Este intento de acabar con los terribles comunistas, ya sabemos cómo acabo para Estados Unidos y el resto del mundo (sino, un poco de historia no os vendría mal).
La película está contada en clave de humor bastante cínico, y es que no se puede tomar de otra manera, viendo lo sucesos (reales) de esta película, que pone en evidencia la política exterior norteamericana. En palabras del propio Wilson (mas o menos) "Estas cosas ocurrieron. Fueron gloriosas y cambiaron el mundo... y luego nosotros la jodimos".
Los diálogos, a parte de la controvertida e “irreal” historia, es lo más destacable de la película, Sorkin, vuelve a obsequiarnos con diálogos inteligentes, ácidos, irónicos, .... con un ritmo imparable.
Como no, entre tanto hecho, personajes, y demás, histórico y sobretodo político, la película puede llegar a ser confusa y espesa en más de una ocasión, sobre todo con tanto tecnicismo por medio y de cómo es habitual en muchas de esta clase de películas, suponer que sabemos y conocemos todo en lo referente a ello.
El reparto, para mí, es una de las partes más “difíciles” de las película, ya que la elección de lso actores me parece nada acertada, aunque mi criterio se basa, más que nada, en la poca simpatía, o “aguante” que le proceso a los actores que intervienen. Tom Hanks (no le aguanto) y Philip Seymour Hoffman (más que nada su voz y sus maneras, aunque, quizá, seguro, que propias del personaje, como ya pasaba con Truman Capote) protagonizan la película (este último superándole con creces en calidad interpretativa). A los que se les une entre otros, y como secundaria, a pesar de que quieren venderla como si fuera de ella y Tom Hanks, Julia Roberts (tampoco la aguanto).
No es lo que podría llegar a ser o mejor dicho lo que esperaba de ella, es decir, mas autocritica y menos conservadurismo, algo de más garra, menos insinuación del 11-S y mas atrevimiento y exponerlo claramente. Por desgracia flojea por demasiadas partes para ser una película redonda, pero sin duda es una propuesta muy interesante, como ya sucedía con la película protagonizada por George Clooney, Michael Clayton, necesaria para concienciar a la gente (sobre todo al pueblo norteamericano), ademas de comprender (en cierta medida) un hecho de la reciente Historia Mundial.
Puntuación 6.5/10
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