Basada ligeramente en el cuento Hugo y Nebula, de David Gerrold, esta película dirigida por Menno Meyjes, nos cuenta como David, un exitoso escritor de ciencia ficción que aun no se ha recuperado de la muerte de su mujer, hace dos años, tras la insistencia de diversos amigos adoptara a un niño. Pero no a un niño cualquiera, sino a alguien especial, a alguien que necesita de su ayuda por sus propias experiencias traumáticas de juventud y su profesión. Un niño introvertido que dice venir de Marte.
Aunque se juega con que si el niño es de verdad o no de Marte (la parte más interesante de la película), la película se centra más en el drama entre estos dos personajes, y sus difíciles vidas por rehacer sus vidas en pareja, para integrarse en el mundo y seguir con sus vidas hacia adelante, pero no este mundo y sus gentes no se lo pondrá nada fácil.
Lo más destacable de la película es el reparto, Bobby Coleman y John Cusack, que muestran desde el principio una química increíble. Y una corta pero siempre agradable aparición de Joan Cusack; además de Amanda Peet, Oliver Paltt y Anjelica Huston, entre otros.
Una película bienintencionada, “para toda la familia”, con algún momentos destacable, pero su intención sensiblera la pierde (mientras la veía valoraba mejor Juno) por caminos demasiado obvios, forzados, y empalagosos.
Puntuación 4/10
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