La semana de parasitos (EL CAZADOR DE SUEÑOS)

Cuando fui a ver esta película, recuerdo que las malas críticas iban y venían, quizá por ello, y no esperarme más que una entretenida película, acabo sorprendiéndome y agradándome.

Basada en una novela de Stephen King “Dreamcatcher” nos cuenta la historia de cuatro amigos, Jonesy, Henry, Pete y Beaver, algo fracasados, se diferencian de los demás, por poseer ciertos poderes, adquiridos cuando solo eran niños gracias a un amigo en común, Duddits, un chico algo misterioso al que salvaron de unos matones. Nunca han utilizados sus poderes para nada en concreto salvo para salvar a una niña cuando eran jóvenes, pero, ahora que el mundo está amenazado por unos alienígenas, puede que le encuentren utilidad.

La película tiene un comienzo muy prometedor, proporcionándonos una atrayente e inquietante historia con algún toque de humor; pero la llegada de los militares y la absurdez del personaje de Morgan Freeman , hace que poco a poco, y cada vez más, la película vaya perdiendo interés, hasta llegar a un final ridículo que remata la “faena”.
Toda la parte de la amistad entre los protagonistas, lo fascinante (e incluso delirante) de los poderes de estos (lo de crearse una biblioteca en la memoria para los recuerdo, el comunicarse entre ellos tanto telepáticamente como por medio de objetos, …..), la posesión de uno de los personajes por uno de los alienígenas y como se representa de manera tan excéntrica, las numerosas referencias “frikis” de la historia (causa de la obra original de King), la asquerosa (y hasta cierta parte gore)pero al mismo tiempo desternillante manera como los extraterrestres entran y salen como parásitos del cuerpo de los humanos, ……. Son elementos que hacen a la película destacable, pero hay demasiados fallos en el guion y desarrollo de los personajes (al querer resumir la obra original en solo poco más de dos horas, por lo que se precipitan los hechos), sobretodo en la segunda parte de la película (vamos cuando aparecen los militares), que es imposible olvidarlos.

Los actores están correctos en sus papeles, “simpaticones”, pero no tienen talento para destacar (y Freeman, esta tan histriónico y fuera de lugar, que da vergüenza), salvo quizá, Damian Lewis, al que descubrí en esta película, y reencontré recientemente en la serie de TV, Life, y que como en esas misma serie, tiene el merito de hacer comprensible a un personaje tan incomprensible.
Como dato curiosos, podemos ver, que Timothy Olyphant, no fue hasta Deadwood, que tenia esa temple de seriedad, sosería, ….. (perfecto para el papel de dicha y fantastica serie de television) que le hacen asemejarse a un poste telefónico (por sus andares y falta de expresibilidad).

Lawrence Kasdan, es el director de la película, y la verdad, sorprende que se hubiera decantado por un proyecto así (supongo que todos tiene que pagar la hipoteca), su labor aquí, es imperceptible, quizá, con la primera parte, se le vea más a gusto.

“El cazador de sueños”, no es una buena película, pero entretiene, y quizá, por lo “facilona” que es, y por ciertos aspectos excéntricos y gore, la hacen asemejarse a una cinta de serie B (vale, vale, es un crimen decir esto porque su presupuesto es elevado, pero creo que en cierta medida, esa es su intención, es ser, una película de serie B), dándole un cierto encanto, que hace que valore mas positivamente de lo que se merece esta película (vale, el guapetón de Thomas Jane, también influye), pero es que no me canso de verla, me entretiene y divierte, siempre que la veo.


Puntuación 6/10