Molly y Tim acaban de casarse, y se instalan en la antigua casa familiar de ella. Al poco tiempo resultará obvio que algo no anda bien en el lugar. Ruidos inexplicables, golpes... El ambiente se enrarecerá mientras Molly ve resurgir los fantasmas de su pasado.
Eduardo Sanchez codirector de la película de culto ”El proyecto de la bruja de Blair” presenta en su nueva película, “Lovely Molly” una ambigua y perturbadora película sobre una joven que sufre un trauma, y un acoso sobrenatural.
La debutante Gretchen Lodge hace una visceral actuación interpretando a Molly, una joven que se traslada con su nuevo marido a la casa de su infancia donde sus padres murieron, reencontrándose con sus recuerdos traumáticos y sus peores pesadillas, con una presencia que no deja de atormentarla.
Con un ritmo lento, Sánchez utiliza de manera muy efectiva a la casa en que se desarrolla la acción para generar una gran tensión, combinando silencio, oscuridad y ruidos extraños. Lástima que no acabe de aclararse las ideas y del estilo que quiere presentarnos, y entre el vaivén de la película entre el terror psicológico y sobrenatural, se pierda y no acabe de darnos la película redonda que podría haber sido.
Puntuación 6/10
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